Lebrel irlandés
Otros nombres: Wolfhound, Cú/ Cú Faoil, Lebrel de Irlanda, Irish Wolfhound

¡El Lebrel irlandés o Lobero irlandés es un gigante lleno de amor! Se trata de un perro dulce, leal y muy cariñoso. Como muchos lebreles, es muy cercano a su grupo social y disfruta protegiéndolo. No es un perro guardián de territorio, ¡pero puede llegar a ser muy intimidante si molestan a su amo! Es muy paciente y amigable con los niños, por lo que se integra perfectamente en la vida en familia a pesar de su impresionante tamaño.
Información principal sobre el Lebrel irlandés
Historia y orígenes
Las opiniones sobre su origen son discordantes: algunos autores piensan que se trata de una raza reciente (siglo XIX), pero la mayoría de los especialistas consideran que tiene mucha historia a sus espaldas. Sus orígenes serían tan lejanos como para remontarse al siglo 391 a.C. Al parecer, fue en ese año que un cónsul romano recibió como presente por parte de su hermano siete perros irlandeses gigantes para combatir en las arenas contra osos y leones. La descripción de estos perros se corresponde con la del Irish Wolfhound.
Grupo FCI
Grupo FCI
Grupo 10 - Lebreles
Sección
Sección 2: Lebreles de pelo duro
Características físicas del Lebrel irlandés
Tamaño del Lebrel irlandés
Hembra : Entre 71 y 81 cm
Macho : Entre 79 y 86 cm
Peso del Lebrel irlandés
Hembra : Entre 40 y 54 kg
Macho : Entre 40 y 54 kg
Colores del pelaje del Lebrel irlandés
Los colores de manto autorizados son: gris, atigrado, rojo, negro, blanco puro o leonado.
Tipos de pelaje
Su pelo es semilargo.
El pelo es fuerte, duro, “de alarmbre” sobre los ojos y bajo la mandíbula inferior.
Colores de ojos del Lebrel irlandés
Los ojos son de color oscuro.
Características físicas del Lebrel irlandés
El Lobero irlandés es uno de los perros más grandes del mundo: un lebrel de cuerpo alargado e imponente, con una musculatura robusta y una grupa y una espalda anchas. Las patas son alargadas, rectas y de osatura fuerte. La cabeza es alargada y plana con un cráneo no muy ancho, un hocico largo y levemente afilado. Los ojos son pequeños, oscuros, con una mirada dulce. Las orejas son pequeñas y portadas en forma de rosa, como las del Greyhound.
Conviene saber...
Hubo una época en la que este perro no podía vivir en un hogar cualquiera, únicamente la nobleza estaba autorizada a poseer un Lobero irlandés. Era posible encontrarlo en diferentes cortes reales, como la de Eduardo III; Enrique VIII e Isabel I en inglaterra o la de Enrique IV en Francia.